Muchas personas buscan ayuda en los departamentos de emergencia para las infecciones del tracto urinario. Sin embargo, los estudios han encontrado que los antibióticos se usan incorrectamente entre el 30 y el 40% de las veces. Una razón de esto es que los urocultivos tomados durante la visita al departamento de emergencias pueden tardar varios días en procesarse. Si se usan demasiados antibióticos cuando no son necesarios, o si no se administran suficientes cuando se necesitan, esto puede hacer que las bacterias en la comunidad local cambien y que las infecciones se vuelvan más difíciles de tratar con los antibióticos habituales. Observaron que se podría mejorar el seguimiento de las infecciones del tracto urinario atendidas en el servicio de urgencias.

En 2020, iniciaron un nuevo proceso en el que los farmacéuticos revisaron todos los urocultivos del departamento de emergencias que se procesaron como positivos. Hicieron un seguimiento de si se realizaron cambios en los antibióticos que se ordenaron y cuánto tiempo llevó hacerlos. Luego compararon el proceso antiguo con el proceso nuevo. Cuando los farmacéuticos revisaron los urocultivos, se realizaron cambios más apropiados a los antibióticos. Los farmacéuticos pudieron realizar un seguimiento aproximadamente 1 día más rápido y los pacientes tomaron ciclos más cortos de antibióticos, lo que les permitió ahorrar 64 días de antibióticos en un período de tiempo de 2 meses. Pudieron hacer esto sin que los pacientes regresaran al departamento de emergencias con más frecuencia. Además de reducir la cantidad de antibióticos utilizados para las infecciones del tracto urinario, también se dieron cuenta de que parte de la limitación era que las muestras a menudo estaban contaminadas. Esto sugirió que una mejora en las técnicas para tomar muestras de orina podría ayudar a producir mejores muestras. A partir de entonces, se colocaron nuevos letreros con instrucciones claras en los baños y crearon materiales para ayudar a los médicos del departamento de emergencias a elegir el mejor antibiótico.